En este artículo vamos a demostrar que el Factor Centésimo del Año Solar (FCAS) es la clave más importante para entender cuándo vendrá el fin de la historia.
El FCAS fue descubierto después de varios años de investigación cronológica. Hoy lo pondremos a prueba nuevamente.
Gracias al FCAS sabemos que el fin de la historia del hombre vendrá en el mes que comienza con la luna nueva del 12 de enero de 2021. Además, se ha deducido que el Milenio del Reino del Mesías comenzará en Etanim (Tishri) de 2024.
El FCAS es 3,65242189
Sabemos que desde Adán hasta la salida de Noé del Arca hay esencialmente 1656 años y 59 días. Esto es 604.900 días. Si le aplicamos el FCAS a este número, obtendremos 6049 años, es decir, 2.209.350 días. El número es así de exacto, y va para más todavía.
El año del Diluvio representa los últimos 1350 días de este enorme período. Eso nos deja un número más redondo, a saber, 2.208.000 días, el cual va de luna nueva a luna nueva. Más preciso no puede ser.
Ahora, vayamos a las claves de Enoc y Matusalén para entender dónde se origina el fin del mundo.
LA CLAVE DE MATUSALÉN
Enoc fue engendrado en el otoño de 3405 aEC, y nació en agosto de 3404 aEC. Habían transcurrido 622 años desde Adán. Luego, su hijo Matusalén fue engendrado en el otoño de 3340 aEC y nació en agosto de 3339 aEC.
Gracias al paralelismo cronológico que existió entre Adán y Jesús, fue posible encontrar una relación entre Enoc y el nacimiento del islam. Así como Enoc había nacido 622 años desde Adán, el islam tuvo su nacimiento formal 622 años desde Jesús. De hecho, el islam nació con la luna nueva de agosto del año 622.
No conozco con total claridad el por qué de este paralelismo, pero sí sé hacia dónde apunta: El fin de los tiempos. Y esto se deduce de lo que pasó 65 años después del nacimiento del islam. En el año 687, los islámicos comenzaron a edificar el Domo de la Roca, y lo hicieron precisamente donde estaba el Arca del Pacto, el Santísimo del templo de Salomón. De hecho, existen razones fuertes para creer que allí estuvo originalmente el árbol de la vida del jardín de Edén.
El paralelismo establece que el Domo de la Roca corresponde con Matusalén. Y si este personaje murió al tiempo de comenzar el Diluvio, entonces se deduce que el Fin de la Era vendrá con la destrucción del Domo de la Roca.
Ahora veamos algunas relaciones cronológicas ya conocidas aquí:
(1) Desde agosto de 3339 aEC, cuando nace Matusalén, hasta agosto de 622 EC, cuando nace el islam, hay 3960 años. Esto es 11 Tiempos, muy parecido a lo que se cumple este año, al finalizar la Era del Pacto Abrahámico.
(2) Hay 1290 años desde 604 aEC, cuando comienzan siete Tiempos de restricciones para la tierra de los judíos (los cuales terminan con la Declaración Balfour en 1917 EC) y 687 EC, cuando es edificado el Domo de la Roca. Al parecer, aquí hay como la sombra de los 1290 días de Daniel 12:11.
EL FACTOR APLICADO
Cuando vimos la clave de Mahalalel, descubrimos que desde Adán hasta la muerte de este personaje habían 1290 años. ¿Qué es lo que ocurre cuando a estos 1290 años le aplicamos el FCAS?
Obtenemos 4711 años y 228 días. Contados desde el 1 de Etanim de 4026 aEC, este período terminaría en la primavera del año 687 EC, precisamente al comenzar la edificación del Domo de la Roca.
Esto quiere decir que aplicar aquí el final de un período de 1290 años es correcto.
Ahora apliquemos de otra forma el FCAS. Sabemos que Matusalén nació a los 687 años desde Adán. ¿Qué resultado obtenemos al aplicar el FCAS a estos 687 años?
Obtenemos 2509 años y 78 días. Contados desde el 1 de Etanim de 4026 aEC, este período termina en el otoño tardío de 1517 aEC. Y esto es significativo, porque nos lleva a tres años y medio antes de la validación del Pacto de la Ley, el cual dio origen formal al sistema de adoración de los israelitas.
En otras palabras, el FCAS nos está ayudado a establecer una relación entre Matusalén y el sistema de adoración de los judíos. Y también sucedió que así como murió Matusalén justo antes del Diluvio, la desaparición del sistema de los judíos marcó el fin de una era, un comparable al Diluvio desde el punto de vista de Jesús.
HAY MÁS POR DESCUBRIR
A veces no me doy el tiempo suficiente para ver estos asuntos, pero sé que hay mucho más.
Mientras tanto, tan sólo estos dos ejemplos confirman que la cronología que usamos es correcta, y también confirman que el FCAS es válido. Así pues, esperar que el Fin de los Tiempos venga al completarse 6049 años desde Adán no sólo es coherente y correcto, sino que debería impulsarnos a tener más cuidado con nuestras prioridades.
Bendiciones.
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