2019 es el año

Estimados amigos:

Después de haber hecho algunas evaluaciones sobre la Cronología que hemos estado utilizando, he llegado a la conclusión de que no podemos especular con los nuevos datos, así que vamos a seguir utilizando los años 1513 aEC y 33 EC como los años del Éxodo y el sacrificio de Yeshúa el Mesías respectivamente. Lo que se publicó acerca de 1516 aEC y 30 EC quedará en mis apuntes personales, por ahora, y será eliminado de este sitio. Disculpen las inconveniencias.

Ahora, los invito a considerar la evidencia más directa y palpable sobre la confirmación de 2019 como el año del gran cambio que esperábamos, precisamente cuando se completan los 100 años de la separación generacional representados por Abrahán-Isaac y por Noé-sus hijos.

LA CLASE DAVID, LA CLASE JOSÉ

Sabemos que la clase José nació en 1919, después de su salida de prisión, a partir de Abib. Luego de algunos meses de organización, comenzaron a ser entrenados y preparados para la gran obra que tenían que efectuar. En 1919, en el mes de junio, ocurrieron cosas importantes que cambiarían el panorama internacional. Una de ellas fue el Tratado de Versalles, firmado el 28 de junio, el cual entró en vigor el 10 de enero de 1920. El tratado estableció la creación de la Sociedad de Naciones, por iniciativa del presidente de los Estados Unidos, Woodrow Wilson. Sus primeros 26 artículos estuvieron dedicados al llamado "Pacto de la Sociedad de Naciones".

El significado de esto es que precisamente, cuando nacen los representantes de la Simiente de Abrahán para nuestros tiempos, la primera clase de los hijos de Raquel, el Diablo también fomentó el nacimiento de su propia estructura de gobierno, aunque sin autoridad todavía. Esto ocurrió con el nacimiento de la Sociedad de Naciones, una entidad que después sería reemplazada por la Organización de las Naciones Unidas.

Ahora bien, la clase José había sido aprobada desde el momento que fue condenada a la prisión. Era necesario que pasaran por tal experiencia, en armonía con las palabras dadas por Yeshúa a la congregación de Esmirna:

No tengas miedo de las cosas que estás para sufrir. ¡Mira! El Diablo seguirá echando a algunos de ustedes en la prisión para que sean puestos a prueba plenamente, y para que tengan tribulación diez días. Pruébate fiel hasta la misma muerte, y yo te daré la corona de la vida. (Apocalipsis 2:10.)

Así pues, su aprobación tuvo lugar entre el 7 de mayo y el 21 de junio de 1918. En vista de esto, significativo es que unos 3.000 años atrás, según la Cronología que utilizamos, tuviese lugar el ungimiento del rey David por Samuel. Eso ocurrió en la primavera de 1083 aEC, probablemente alrededor del Pentecostés.

El orden de los eventos cronológicos, ya que Yehóvah es perfecto en su modo de ordenar las cosas, nos dice que el ungimiento de David, que dio inicio al Pacto Davídico, tuvo lugar en la primavera de 1083 aEC, porque en ese tiempo se cumplían 430 años desde el Pacto de la Ley (primavera de 1513 aEC) y dos veces 430 años desde el Pacto Abrahámico (primavera de 1943 aEC).

*Nota* 
Es probable, también, que hubiesen transcurrido tres veces 430 años (1290 años) desde la primavera de 2373 aEC, cuando se cumplieron 1652 años y medio desde Etanim de 4026 aEC. Esa cantidad de tiempo está asociada al Modelo del Santuario en relación con el número de Israel, a saber, 603.550 días.

Hemos de entender, en consecuencia, que la clase José fue aprobada, en lo que tiene que ver con su ENGENDRAMIENTO, al tiempo del solsticio de verano de 1918. Unos nueve meses después, sucedió el nacimiento de la misma, en Abib de 1919, comenzando así los 100 años que nos llevan hasta el mes en el que nos encontramos, cuando tendría lugar el nacimiento de la clase Benjamín, es decir, el remanente de los últimos sellados de los 144.000 esclavos de Yehóvah.

LA SEÑAL DE LOS SIETE TIEMPOS SOLARES

No podemos menospreciar la señal que se nos ha dado acerca de los SIETE TIEMPOS SOLARES. Contados desde el 16 de Etanim de 539 aEC (5 de octubre), tenemos que estos 933.813 días se completarán al tiempo de la luna llena del 16/17 de junio de 2019. 

Puesto que el punto de partida fue el 16 de Etanim, el punto de llegada es el día 16 del mes lunar hebreo que corresponde (18/19 de junio).

En mi opinión, aunque los siete Tiempos son SOLARES, en la práctica, van de un momento exacto del mes lunar hacia otro momento correspondiente en otro mes lunar. Si comenzó un día 16, tiene que llegar al día 16.

Puesto que el día 1 de Abib en 2019 coincidió con el 6 de abril, el mes tercero sería el que comienza el 5 de junio. En consecuencia, el día 16 de ese mes sería el 19 de junio, con un margen de error de un día.

Desde aquí, si contamos los 2300 días del cierre de la historia, estaremos llegando, invariablemente, al final de los 6050 años de la Historia del Hombre, que comenzaron en octubre de 4026 aEC y terminarán en octubre de 2025 EC.

Estos 2300 días terminan, si el punto de partida es el 18/19 de junio de 2019, el día 5 de octubre de 2025 EC. Para calibrar este número, se nos ha proporcionado otra señal de tiempo: El día de la luna llena del 12 de agosto de 2022 se completarán 726.600 días desde el sacrificio de Yeshúa el Mesías, y este día tiene que encontrarse en el centro de estos 2300 días que están por comenzar. Por lo tanto, tenemos que:

• 1150 días hacia adelante, desde el 12 de agosto de 2022, es el 5 de octubre de 2025, cuando se cierran los 6050 años.
• 1150 días hacia atrás, desde el 12 de agosto de 2022, es el 19 de junio de 2019.

NO OLVIDEMOS ESTO.
PUEDE SER MÁS IMPORTANTE DE LO QUE CREEMOS.